Estados Unidos persigue a Francisco Villa en Mexico
John J. Pershing es el único militar estadounidense que alcanzó en vida el rango de general de los Ejércitos, solo superado por George Washington a quien se le concedió retroactivamente con mayor antigüedad. Dirigió la Fuerza Expedicionaria Estadounidense en la Primera Guerra Mundial y se considera el mentor de la generación de los generales que comandaron las fuerzas del ejército estadounidense en Europa durante la Segunda Guerra Mundial, incluyendo a George Marshall, Dwight D. Eisenhower, Omar Bradley y George Patton.
También es conocido por comandar la expedición punitiva en 1916 que fue enviada a México para intentar atrapar a Francisco Villa, y que no logro su objetivo. La expedición punitiva contra Villa duró del 9 de marzo de 1916 al 7 de febrero de 1917.
Al distanciarse Francisco Villa de Venustiano Carranza se enfrentó contra las tropas constitucionalistas al mando del general Álvaro Obregón entre el 6 y el 15 de abril de 1915 siendo derrotado. Por esta razón paso de ser un revolucionario a ser enemigo del gobierno. A fines de 1915 el presidente de los Estados Unidos Woodrow Wilson reconoció a Venustiano Carranza como gobierno de facto en México, procediendo al intercambio de embajadores y prohibiendo la venta de armas a fuerzas armadas contrarias al constitucionalismo, medida que enfureció a Villa.
Al amanecer del 9 de marzo de 1916 un grupo de 589 hombres de Francisco Villa atacó el pueblo de Columbus, Nuevo México, como respuesta al reconocimiento oficial del régimen carrancista por parte de los Estados Unidos y porque Samuel Ravel y su hermano, que vendían armas, habían defraudado a los villistas que trataban de comprarle armamento para seguir en lucha.
En ese momento también se dijo que Villa fue patrocinado para realizar este ataque y evitar la entrada de Estados Unidos a la Primera Guerra Mundial.
En la operación, los Villista atacaron un destacamento de la caballería estadounidense capturando 80 caballos, 30 mulas y 300 fusiles. Los Villistas incendiaron varios edificios, incluyendo el hotel donde se pertrecharon civiles que repelieron el ataque. En realidad, los civiles provocaron muchas más bajas a los villistas que la guarnición que fue tomada desprevenida. Murieron 17 militares estadounidenses y 10 civiles; 73 villistas murieron en el ataque y 7 fueron capturados.
El Presidente estadounidense Wilson envió tropas encabezadas por John Pershing a buscar a Villa, en lo que llamo “La expedición Punitiva” para “castigar a los bandoleros Villistas”, misma que entro a México por el estado de Chihuahua el 15 de marzo de 1826. Inicialmente fueron 4,800 efectivos y llegaron hasta la ciudad de Parral.
Esta fue la última verdadera acción de la caballería montada del ejército estadounidense, e irónicamente, también fue el primer ensayo militar del empleo de vehículos motorizados. Pershing experimentó en México con el uso de automóviles, camiones y aviones, sin embargo el combustible necesario para aquellas máquinas a menudo tuvo que ser transportado a lomo de mulas.
Corrió la versión de que los Villistas capturaron un avión estadounidense, y se mostraba una foto de Villa junto a la supuesta nave capturada. El hecho es que esa foto fue tomada mucho antes del ataque a Columbus.
Hubo varios combates entre las fuerzas villistas y los soldados estadounidenses quienes sufrieron muchas bajas en San Isidro, Aguacaliente y Puerto de Varas. En Parral los invasores fueron expulsados.
El ejército estadounidense, compuesto por tropas negras —conocidos anteriormente como soldados Búfalo— al final terminaron luchando en contra de las fuerzas de Carranza, quienes derrotaron al invasor en Carrizal a 128 kilómetros al sur de Ciudad Juárez el 21 de junio, donde 14 soldados estadounidenses fueron muertos y se tomaron prisioneros otros 24, por lo que una guerra a escala completa parecía inminente entre México y EE. UU. Pero ninguno de los dos países quería la guerra. Después de algunas platicas, Carranza liberó a los prisioneros estadounidenses.
En octubre la Casa Blanca aceptó negociar con los enviados de Carranza quienes en noviembre lograron la firma de un convenio en el cual Estados Unidos se comprometía a retirar las tropas, lo que no se inició hasta el 5 de febrero de 1917 cuando en Querétaro era aprobada la nueva constitución.
En la batalla de San Isidro Pancho Villa sufrió una grave herida por debajo de la rodilla en y buscó refugio en una cueva cerca de Ciudad Guerrero, permaneciendo escondido por varios meses, por lo que no pudo pelear en los combates junto a sus hombres. Al enterarse de la retirada de los estadounidenses de México, dijo: «Ese Pershing vino aquí como un águila y se fue como una gallina mojada». De esta forma regreso con más fuerza a la lucha revolucionaria en contra de Venustiano Carranza.
Pershing se retiró con sus 12,000 soldados, de los cuales murieron 1,000.